POR: ABEL ROJAS
En un artículo del periódico EL PAÍS se refieren los cambios que sufrirá la producción cinematográfica. En los rodajes se guardará la sana distancia. Los actores y actrices tendrán prohibido acercarse a menos de metro y medio de separación entre ellos. No me alcanza la imaginación para prever cómo reaccionará a esto la industria de la pornografía. ¿De a perrito y de a lejitos? Si se fijan, de cualquier manera en las películas “normales” ya casi no hay escenas sexuales. La “moral” impuesta es una infección más peligrosa que el coronavirus.
Todo cambiará para que parezca que nada cambió. La tendencia irreversible incluso antes del virus nos mantenía en casa mirando Netflix. La verdad es que cada mes íbamos menos veces al cine. A pesar de esto Cinemex contempló entre sus planes convertirse en 2020 en la séptima cadena más grande de salas cinematográficas en Estados Unidos. En cambio, ayer anunció que se ampara bajo la figura de la bancarrota. Dramático cambio de planes. ¿Cómo afectará eso la sana competencia con Cinépolis que es la empresa que acapara el mercado en México? ¿En qué sentido actuará la autoridad reguladora?
Pero lo que a mí me interesa más es lo concerniente al arte, a la narrativa, a las historias y los creadores. Mientras algunos asienten con la cabeza pues la pandemia les vino como anillo al dedo, la Academia Mexicana de Cine y Artes Cinematográficas (AMACC) ante la extinción de dos herramientas fundamentales (FOPROCINE y FONCA) exige la creación de “un Plan Integral de Emergencia para la reactivación económica” de la industria cinematográfica. Quitar a los artistas lo que tenían por derecho propio me suena a control, me suena a “te doy pero vas a hacer lo que yo diga”. Ojalá me equivoque. Pero se vale preguntar ¿quién o quiénes serán los cineastas que realizarán la versión fílmica del sexenio? ¿Manolo Caro? No creo.
Por lo pronto las condiciones nuevas son muy difíciles. El público cambió sus preferencias. Aún hay artistas que se aferran a contar historias personales. ¿De verdad avanza esta sociedad? A mí que me dejen de ofrecer remakes. Las versiones originales son suficientes. Traduzcan al cine la ansiedad, la solidaridad, el sacrificio de este momento. Eso es lo que me gustaría ver en pantalla (en el cine o de perdis en 50 pulgadas en casa).
Durante el confinamiento, esto es curioso, mucha gente busca películas sobre epidemias, exterminio, apocalipsis, reclusión. Me imagino que es una especie de síndrome de Estocolmo (ese donde te enamoras de tu violentador). ¿Qué les parecen estas? ¿Ya las vieron?
12 MONKEYS (1995, EEUU. Dir. Terry Gilliam) Se supone que Gilliam (Monthy Python) se basó en el legendario cortometraje LA JETÉE (1962, UK. Dir. Chris Marker) para concebir esta película que sirvió sobre todo para el crecimiento personal de Brad Pitt. A la distancia se deja ver todavía, con sus defectos agrandándose, pero como curiosidad te ayudará a pasar un rato de ocio. En realidad vale más ver el corto de Marker, lo puedes encontrar en YouTube y en Cultura Colectiva.
OUTBREAK (1995, EEUU. Dir. Wolfgang Petersen) El surgimiento del ebola virus puso a las películas apocalípticas de moda. Esta es la típica aventura gringa donde un científico muy chipocles (Dustin Hoffman) hace malabares durante toda la peli pues lucha por encontrar un antídoto contra el virus, salvar la vida de su ex esposa, rebelarse ante la dictadura militar ¡de su propio país, U.S.A.! y lucir un espléndido bronceado todo el tiempo sin que se le baje el color y el tono. Ríete a carcajadas con este mamotreto palomero. Está en Netflix.
CUBE (1997, Canadá. Dir. Vincenzo Natali) Seis personas sin relación previa entre ellas sufren un extraño confinamiento donde el juego es mantenerse unidos o recibirán la muerte como castigo. La ahora famosísima película española EL HOYO le debe todo a esta curiosidad canadiense que a su vez retomó un episodio clásico de THE TWILIGHT ZONE.
EL AÑO DE LA PESTE (1979, México. Dir. Felipe Cazals) Ciencia ficción a la mexicana, realizada con mucho decoro resulta en un retrato bastante cercano de las conductas nacionales que ocurren en este preciso momento. En el caso de la película inicialmente suponen se trata de ¡neumonía! Más que verla con nostalgia, la peli bien puede verse como una escalofriante premonición. Disponible en Filminlatino.
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